Las adicciones y recaídas son un tema tan estudiado como, a su vez, desconocido. A pesar de los estudios médicos y psicológicos de todos estos temas que son tan relevantes, es aún largo todavía el camino que queda por recorrer antes de entender todas las aristas de estos procesos mentales y tratamientos (con todo lo que conlleva).
Cabe destacar que cuando se habla de adicción no nos centramos únicamente en el uso excesivo de las drogas o alcohol. Pues, a pesar de que muchas personas no relacionan el término adicción a cosas más banales, una persona puede sufrir adicción a algo tan cotidiano como las redes sociales o los videojuegos.
En el proceso de tratamiento de una adicción existen situaciones conocidas como “decisiones de riesgo relativo” donde el adicto se enfrenta ante un panorama de posibles tentaciones donde tomará decisiones que lo alejen o lo hagan tener recaída a adicciones contra las que estaba tratándose. Ahí es donde la autoestima suele entrar en juego.
¿Puede el autoestima provocar o evitar recaídas?
La manera en la que nos vemos a nosotros mismos puede influir en muchas cosas y una de las hipótesis estudiadas con el tema de recaída y adicciones es la influencia que tiene la forma en que nos percibimos nosotros mismos con las recaídas.
Generalmente una persona con una autovaloración alta suele darse cuenta de las consecuencias y daños que podría causarle dicha adicción y tener la fuerza de voluntad suficiente para alejarse.
Sin embargo existen varios factores, problemáticas y conductas que tienden a ser patrones para los perfiles de personas con adicciones, especialmente en caso de adicción a las drogas. Dichos comportamientos y problemáticas pueden ser casos como altos niveles de estrés, angustia o tensión (bien sea en un ámbito familiar, escolar o laboral), el ambiente que rodea a la persona, o los roles que desempeña la persona (padre o madre de familia, trabajador, estudiante).
De esta manera, se comprueba que una persona con una percepción débil de sí mismo tiende a ser más influenciado por el medio que los rodea, y a someterse con mayor facilidad al estrés y angustia de su día a día. Todos estos factores, en un ambiente desfavorable, conducirán con cierta naturalidad a la persona a desarrollar o retomar una adicción.
¿Las recaídas afectan el autoestima?
En el proceso de recuperación de adicciones aunque las recaídas suelen considerarse como parte del proceso muchas personas suelen tomarse la recaída como un fracaso una caída sin retorno al medio del cual es adicto.
De esta manera, dicha sensación de fracaso y de no tener escapatoria de un problema que lo está consumiendo (en cualquier ámbito de su vida), causará un efecto negativo directo en su autoestima, donde la persona llegará a sentirse fracasado, perdido y sin esperanzas de salir de su adicción.
Referencias
Adicciones y recaídas: síndrome de la recaída. Instituto Superior de Estudios Psicológicos
Baja autoestima y cómo puede conducir a la adicción a las drogas. Retreat Behavioral.
