Desde la comercialización y expansión global de Internet a finales del siglo XX, hemos experimentado una evolución tecnológica nunca antes vista. A día de hoy, en pleno 2020, la mayoría de hogares poseen acceso a internet y ordenadores o teléfonos móviles con los que conectarse a la red, ¡y entre nosotros! Las redes sociales han supuesto una nueva forma de comunicación y conexión interpersonal nunca vista! El avance de Internet ha permitido mejorar y desarrollarnos en un contexto digital. Sin embargo, también cuenta con una parte negativa: la adicción.
Datos interesantes de conexión a redes sociales
La adicción a las redes sociales es algo reciente, así como ellas mismas, en la sociedad actual. Es una afección que cada día más personas sufren, llegando al punto de que 7 de cada 10 adolescentes españoles pasan más de 1,5 horas conectados a las diferentes redes.
La cantidad de aplicaciones y redes sociales existentes hacen que perdamos la noción del tiempo y no seamos conscientes de cuántas horas podemos pasar consumiendo este tipo de contenido. Estimaciones realizadas por la agencia MediaKix concluyen que una persona joven podrá pasar más de cinco años a lo largo de su vida únicamente utilizando redes sociales.
Ocurre igual que con la adicción a los videojuegos (METER ENLACE ARTÍCULO VIDEOJUEGOS) quizá no sea tan notable, pero en los últimos años observamos un crecimiento exponencial, llegando a la conclusión de que más del 40% de la población española consume este tipo de contenidos.
¿Por qué se produce adicción a las redes sociales?
La explicación científica nos muestra que el uso prolongado en el tiempo de Internet produce placer y pérdida de control en las emociones. Esto se debe principalmente a que las personas con adicción a las redes sociales o adicción a los videojuegos sufren una serie de cambios en su organismo que, involuntariamente, le incitan a seguir delante de la pantalla.
Como explica el coach Daniel Colombo, a nivel hormonal observamos como la adicción a redes sociales viene producida debido a un sistema de recompensas que provoca en el organismo cambios en los neurotransmisores del cerebro. Los principales neurotransmisores que se ven envueltos son la adrenalina y la dopamina.
La adrenalina se identifica con la agresividad y las emociones, por lo que las personas adictas sufren cambios emocionales y pueden mostrarse iracundos. La dopamina, por el contrario, controla el placer y la satisfacción, lo cual nos promueve a seguir consumiendo y utilizando las redes sociales. Existen otros neurotransmisores como la serotonina, la oxitocina o el cortisol que afectan en la conducta y el estado de ánimo y explican el por qué una persona puede llegar a sufrir adicción a las redes sociales.
¿Cómo detectarlo?
Un adicto suele negar su condición y, a menudo, se muestra agresivo o rechaza cualquier conversación al respecto. De igual forma, alguien con adicción a las redes sociales también suele negar su condición y se ve incapaz de controlar los impulsos por revisar dichas redes constantemente.
Además, verá cómo se reduce notablemente su concentración, se aísla socialmente y no es capaz de relacionarse de manera correcta, creando problemas de conducta. Por si fuera poco, en Pfizer han demostrado que un uso irresponsable de las redes sociales también puede poner en peligro la salud, los expertos vinculan algunas enfermedades inflamatorias o auditivas a un uso excesivo de las mismas.
Referencias
Redes Sociales. Agencia Mediakix
Las redes sociales se llevan 5 años de nuestras vidas. Puromarketing.
Cómo funciona el cerebro cuando usas las redes sociales. Daniel Colombo
Las redes sociales ya han modificado nuestro cerebro. Pfizer